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Esto es un blog con delirios de una soñadora chinchuda, antisocial y un poco loca. Estas invitado/a a leer y comentar a gusto y placer, espero que te guste

sábado, 4 de septiembre de 2010

Echó café, en la taza. Echó leche, en la taza de café. Echó azúcar, en el café con leche. Con la cuchara, lo revolvió. Bebió el café con leche. Dejó la taza, sin hablarme. Encendió un cigarrillo. Hizo anillos de humo. Volcó la ceniza en el cenicero sin hablarme. Sin mirarme, se puso de pie. Se puso el sombrero. Se puso el impermeable porque llovía.Y se marchó bajo la lluvia. Sin decir palabra. Sin mirarme.Y me cubrí la cara con las manos. Y lloré.

Jacques Prévert



1 comentario:

Gonzalo Agustin Sueiro dijo...

bellísimo texto. Siempre sostuve que lo contrario al amor no es el odio, sino la indiferencia. El silencio castiga mucho más que las palabras.

te felicito, no sabía que tenías un blog.

saludos
Gonzalo